martes, 19 de julio de 2011

El León, la Bruja y el Ropero.

 O de las cálidas lagrimas que brotan de felicidad, a aquellas que envuelven cierto misticismo, pasando por aquellas que consagramos a la nostalgia, a la vergüenza y al recuerdo.
     En el presente artículo, me permitiré, usar como especie de analogía, el libro titulado El León, la Bruja y el Ropero de C.S. Lewis[1].
El león.
     Para iniciar, que mejor que con una excelente noticia. La semana pasada fuimos testigos de lo que una mentalidad que cree en sí misma, es capaz de hacer y conseguir para el beneficio propio y colectivo. Vimos a unos jóvenes mexicanos que lloraron lágrimas de felicidad, aquellas que solo son dignas de grandes hombres, de grandes proezas, y es que, ¿Quién no jugo, en aquel campo de tierra, de pasto, de calle, con porterías de piedras, de ropa, soñando con anotar el gol del triunfo, en el último minuto, aquel que nos haría Campeones del Mundo? Todos, si no me equivoco. Pues estos jóvenes consiguieron hacer realidad, estos juegos infantiles, estos sueños. Qué barbaridad, y de qué manera, jugando con determinación, con astucia, con magia. De ninguna manera soy cronista deportivo, y tampoco soy un fanático asiduo del futbol, pero que buenos partidos dieron estos muchachos, “con garra”, de ahí que sean el León, de nuestra realidad actual, cual Aslan, creando una nueva esperanza, una creencia de que no todo esta tan mal, que podemos y debemos aspirar a cosas mejores. Ojala que muy pronto volvamos a saber de ellos, y que en sus respectivos clubes, hagan hasta lo imposible por que sigan sobresaliendo. Felicidades.
La bruja.
     Antes de continuar quisiera apuntar que siempre he estado en contra de las ofensas y comentarios fundados en el rencor y la grosería, y no en el argumento y la prueba. Por tales razones, el presente pretende ser solo un ejercicio sano.
O la odias o la amas, o estas con ella o en contra, así de simple, así de sencillo. Su poder trasciende las más altas esferas del poder, puede construir y destruir en segundos. Así es ella, así es Elba Esther Gordillo, una mujer poderosa y de temer; como las brujas. La RAE indica que la bruja, es una “mujer que, según la opinión vulgar, tiene pacto con el diablo y, por ello, poderes extraordinarios” Como la Bruja Blanca de Narnia, que pretende, a como dé lugar, volver realidad el título de Reina de Narnia, ofreciendo cosas extraordinarias a Edmund (engañándolo a fin de cuentas, para beneficio propio), tramando movimientos bajo el agua, o bajo el hielo, conspirando. No es intención hacer una biografía completa de nuestro peculiar personaje, solo intento rescatar, la imposibilidad que una inestable democracia como la nuestra, tiene de ya no se diga impedir, sino controlar, a personajes como estos, y es que no sería la única, los líderes sindicales, podrán, otorgándoles cierto beneficio de la duda, iniciar defendiendo “el hambre y la corrupción de los sindicatos mexicanos, victimas del corporativismo”, pero la verdad es que acaban igual, o peor. El sindicato de electricistas, el sindicato de telefonistas, el de los mineros, el de la educación, etc., etc. No afirmo que no sirvan para nada, al contrario, deben existir, pero también deben quitarse todo ese peso antiguo que han venido arrastrando como cadenas de fantasma, y deben buscar una modernización no solo estructural, sino ética. En este orden de ideas, el que una lideresa sindical, salga y diga ciertas cosas, no inspira nada de confianza, ni a su dirección sindical, ni a la de su partido, que sirven más como empresas familiares, y enumeradas en el testamento, no vaya a ser que alguien se las quiera robar. No, de verdad, es que esto ya es demasiado. En fin, por ello será como la Bruja Blanca, en nuestra triste realidad histórica[2]
El Ropero.
A últimas fechas, no había leído un texto que me gustara tanto como el de la conferencia que dio, Jorge Volpi, en la Universidad de Castilla-La Mancha, el 12 de abril de 2011, y que trajo como consecuencia, la cancelación de su nombramiento, como agregado cultural en Italia. Otro berrinche del gobierno calderonista[3]
El texto de Volpi, sirve como DeLorean, para ir a echar una miradita al futuro que nos espera. Por tal motivo, es el ropero de nuestra película vinculante, ya que nos permite trasladarnos a una realidad mexicana futura, para ser exactos 100 años. En cualquier texto en el que se intente explicar y analizar, el cómo se encontraran las cosas en el futuro, ineludiblemente, será presa del error y de la fantasía en exceso, sin embargo, hay que reconocer, que Volpi hace una crítica y real revisión a temas de interés actual en nuestro mundo futuro. Para no convertir esto en un traslado de las ideas de Volpi, solo señalare dos ideas que llamaron mucho mi atención. Una, la despenalización de las drogas, y dos, la existencia de la Unión Norteamericana, donde el español, es la lengua dominante. El texto de Volpi, me causo sentimientos de felicidad, de esperanza, de “al fin”, veo el porqué de los enojos del gobierno, que no deberían ser, al contrario, el pensamiento crítico intelectual, científico, debe ser usado como pincel en tela nueva, no como diluyente. Un aplauso al texto El México de 2010 visto desde 2110, de Jorge Volpi, nuestro Ropero.


[1] Las crónicas de Narnia: La Bruja, el león y el ropero (1950) escrita por Clive Staples Lewis (Irlanda 1898-Oxford 1963) forma parte de una serie de siete libros que narran las aventuras de niños de nuestra realidad, en una alterna, Narnia.
[2] Existe innumerables textos que relatan las peripecias del poder de nuestro personaje, recientemente Jorge Castañeda, publicó su opinión, aclaro que no estoy de acuerdo con ella, a veces parece demasiado permisivo y falto de objetividad. Castañeda, Jorge, Amores y desamores, en Enfoque Reforma, Núm. 898, 10 de julio de 2011.
[3] Volpi, Jorge, El México de 2010 visto desde 2110, conferencia del 12 d abril de 2011 en la Universidad de Castilla-La Mancha, impresa en el Suplemento Cultural de Reforma el día 10 de julio de 2011.