sábado, 26 de febrero de 2011

Las operaciones mentales básicas.

¿Alguna vez se han encontrado en una situación en la que tenemos tantas y tan variadas ideas en la cabeza, y no hayamos como expresarlas de una manera más fluida y organizada? Definitivamente creo que nadie escapa a esta suposición. Pero, y que tal si en lugar de expresar nuestras ideas, nos toca estar del otro lado de la comunicación, es decir, escuchando y por más que tratemos de organizar y entender lo que alguien nos esté explicando, solo nos quedamos mirando cómo van y vienen las palabras. Creo que también nos ha pasado en algún momento. Pues bien, parte del gran legado que nos dejó la antigua Grecia, nos pueden servir no solo para ayudarnos a recibir y transmitir información, sino también para la generación de nuevos conceptos, nuevas ideas, nuevo conocimiento, estas son las operaciones mentales.

Las operaciones mentales o conceptuadoras, son operaciones lógicas que se hacen con base en conceptos que a su vez darán como resultado la generación de otros más. Son mentales, porque las realizamos a nivel interno, mental, al recibir-identificar-decodificar-codificar-transmitir cierta información. Es algo que hacemos todos los días, cuando conocemos una nueva palabra, un nuevo objeto, cuando tomamos una determinada decisión de un abanico de posibilidades, cuando sopesamos cierta información. Eso son las operaciones mentales. Bueno ¿y cuáles son? Pues básicamente son tres, sin embargo algunos autores, nunca falta el que no esté de acuerdo, dicen que son cinco. Estas son: la descripción, la definición, la división, la clasificación y la ordenación. Para efectos prácticos revisemos las operaciones más básicas.

La definición, es una operación lógica, mediante la cual delimitamos los alcances de un término así como su significado. Existen diversas clasificaciones para las definiciones, sin embargo solo señalaremos una tradicional, que las clasifica en dos grupos: nominales y reales. En las primeras, la definición recae sobre el término que se utiliza para denominar un concepto y estas pueden ser etimológicas (origen de la raíz, es decir, del termino), sinonímicas (sustitución de objetos complejos o poco comunes por uno de uso cotidiano) y genéticas (se establece la evolución de un término). En las reales, la definición recae sobre el objeto mismo: género próximo, diferencia específica. El género próximo lo podemos entender como el universo o el con junto del cual forma parte el objeto, en tanto que la diferencia específica, es aquello que lo distingue de ese grupo. Apliquémoslo al término aire:
Genero próximo: gases, diferencia especifica: compuesto principalmente de oxígeno y nitrógeno.
En cuanto a la división, podemos señalar que tiene como propósito, separar el todo en partes. Estas, deben contener todo el universo del concepto, una parte no puede contener otra, no deben mezclarse elementos y debe realizarse de manera ordenada: Norteamérica: Canadá, E.U., México.

La clasificación, agrupa serialmente elementos coordinados y que respecto a otro tienen una relación subordinada. Valdría la pena aclarar que a diferencia de la división, donde solo se divide un todo en partes, la clasificación lo hace atendiendo a un criterio clasificador, exhaustivo y excluyente:
Personas que leen este blog, supongamos que son 100. Los podríamos clasificar de acuerdo al sexo, rangos de edades, escolaridad, etc.
Para finalizar y en atención a los comentarios enunciados al principio, podemos asegurar que, si realizamos de manera consiente y constante, estas operaciones mentales, en nuestro día a día, definitivamente nos ayudaran a dar y recibir diversa clase de información de manera más precisa. Es menester señalar, que si bien es cierto, conocemos, en parte, el significado de tal o cual palabra, es al momento de expresar dicho significado, cuando más cuesta decir lo que pensamos, lo tenemos en la punta de la lengua, pero no lo decimos, o lo decimos mal. Claramente podemos ver, como estas operaciones mentales nos pueden ayudar a expresarnos y razonar mejor.

miércoles, 23 de febrero de 2011

El Kybalión

Hace ya algunos años, cuando estudiaba el bachillerato en el Colegio de Ciencias y Humanidades Azcapotzalco, y vivía en casa de mi abuela, me encontré con un libro, que de primera instancia causo una mezcla de sentimientos encontrados. Por un lado, parecía que no era más que una alucinación chafa de algún tipo que gustaba de la brujería y el esoterismo. Me pareció que era uno de esos libros que te enseñan cómo usar las velas de color para conseguir diversas cosas en la vida. Pero por otro lado, algunas palabras llamaron mi atención, me preguntaba si lo que ahí se explicaba, existiera verdaderamente y como se aplicaría en la realidad. Solo leí un capitulo y nunca más lo volví a tomar. Ahora y muchos años más tarde, con experiencias y conocimientos distintos, me encuentro nuevamente con él y finalmente he terminado de leerlo. Una perspectiva totalmente diferente.
     El Kybalión, es una expresión de 7 máximas, axiomas o principios que intentan dar una explicación de la realidad. Fue escrito por alumnos, Los Tres Iniciados, en base a las enseñanzas de su maestro Hermes Trismegisto, Maestro de Maestros, el Tres Veces Grande, quien vivió en el antiguo Egipto y del cual después los egipcios convertirían en deidad, según se cuenta.
     Hablar de El Kybalión, puede resultar indiferente e incluso puede tornarse en molestia en aquellas personas que, de entrada, ponen una barrera, ya sea de tipo religiosa o cultural, principalmente. El libro mueve y hace que reflexiones absolutamente de todo lo que te rodea, me parece, inclusive, que puede que termines mirando al mundo de otra manera. La filosofía del Kybalión, es una filosofía completa, intenta explicar el Todo.
     Los principios en los cuales se basa la filosofía del Kybalión, son:
Mentalismo: Todo es mente
Correspondencia: Como es arriba es abajo
Vibración: Todo vibra, nada es estático
Polaridad: Todo tiene dos polos, los opuestos se juntan
Causa y efecto: Toda causa tiene un efecto
Ritmo: Todo fluye y refluye, es la compensación
Género: Todo tiene masculino y femenino
     Explicar cada uno de estos principios podría tomarnos más tiempo del debido. Por tal razón resultaría más práctico hacer una exposición global y muy sencilla de los mismos:
     “Más allá del cosmos, del tiempo, del espacio, de todo cuanto se mueve y cambia, se encuentra la realidad substancial, la verdad fundamental”. El Todo, el cual crea absolutamente todo de manera mental, tal y como tú, creas tu propio universo, en tu propia mente, es decir, en aplicación del principio de Correspondencia en los planos físico, mental y espiritual, planos en los que todo está en movimiento y sujeto a una Polaridad, a un Ritmo y a un Género. El universo se mueve, vibra y se transforma, tal como lo hacen los electrones con carga negativa, alrededor de un núcleo formado por neutrones y protones con carga positiva. Cualquier objeto inanimado parecería que no se mueve, sin embargo no es así, tiene átomos que se mueven en su interior y además, ¿acaso el planeta Tierra no gira alrededor del sol, junto con ese objeto? Claro que sí, y tal como lo hace el sistema solar de nuestro sol alrededor de la galaxia, y esta, a su vez del universo y así infinitamente, Causa y efecto.
     La lectura de El Kybalión, deja una sensación de conocer mejor el mundo que nos rodea. Por supuesto que no es mi intención hacer que tiren por la borda ninguna creencia de cualquier tipo, pero si cabe la pena señalar que la filosofía del Kybalión, es eso, una filosofía que pretende y busca la verdad, como muchas otras creencias o corrientes filosóficas. La lectura del Kybalión, responderá algunas preguntas que, alguna vez, te hayas hecho, pero también, te dejara algunas otras dudas más.

martes, 15 de febrero de 2011

El conocimiento

A través de la historia el hombre se ha enfrentado a diversos obstáculos en su desarrollo, sin embargo, estos, han servido para acrecentar y reafirmar su dominio sobre el medio que lo rodea, en el momento en que los toma como oportunidades. La interacción social, trae aparejada una necesidad de comunicación, el desarrollo de habilidades físicas trae consigo la necesidad de conocer mejor su cuerpo, posibilidades y límites, el desarrollo de la ciencia y la técnica no serían posibles si no observamos, conocemos, el mundo que nos rodea.
     En este sentido el conocimiento juega un papel importante, pero ¿Qué es el conocimiento? De manera general podemos decir que el conocimiento, es el resultado de una interacción entre cuatro elementos: un sujeto, un objeto de conocimiento, una representación interna y la relación u operación entre estos elementos. El sujeto eres tu cuando percibes algo por medio de tus sentidos, escuchas, ves, hueles, tocas, saboreas. El objeto es todo aquello que percibes y puede ser algo físicamente visible por ejemplo una silla o algo incorpóreo es decir que no puedes ver o tocar pero que sin embargo está ahí, un concepto, como por ejemplo la justicia. La representación interna es una imagen que se forma en tu interior respecto del objeto de conocimiento. Y, finalmente, la relación, operación o proceso son todos aquellos actos que se dan entre los otros tres, es decir como percibo un objeto por primera vez, lo represento internamente y tengo una primera impresión de él, pero también va de ida y vuelta al objeto. Al respecto podemos comentar que para algunos autores, el conocimiento nace primero del objeto al sujeto (Teoría mecanicista del reflejo), para otros va del sujeto al objeto (Teoría idealista), en varias direcciones entre objeto y sujeto (Teoría modificada del reflejo), o como una construcción sujeto-objeto (Teoría modificada del reflejo vertiente dialectico-constructivista). Sin embargo, finalmente, lo importante es conocer ya sea desde una perspectiva vulgar, empírica, científica o filosófica.
     El conocimiento vulgar es aquel que aceptamos sin preguntar por qué, no nos interesa lo aceptamos como es. En el conocimiento empírico lo más importante son nuestras experiencias, es decir a nuestras vivencias cotidianas. En el conocimiento científico sometemos a una investigación derivada de un método al conocimiento de manera objetiva, racional, sistemática y verificable. Finalmente el conocimiento filosófico, es un conocimiento de segundo nivel sobre la validez del propio conocimiento y pertenencia, es decir, si los resultados son buenos o malos.
     Así que la próxima vez que leas un artículo (como ahora), o veas un animal que no sabías que existía, imagina como se va dando esa relación objeto-sujeto y en qué nivel de conocimiento te puedes encontrar.